Como ella a veces me desbarata el discurso y me deja sin armas, yo tomo venganza desbaratando las películas que le gustan, con la ayuda de mis estudiantes.
A tu resplandor me entrego, igual que el ciego a la mano; se siente tu claridad hasta en los ojos cerrados, —presencia que no se ve—, acariciando los párpados.
A tu resplandor me entrego,
ResponderEliminarigual que el ciego a la mano;
se siente tu claridad
hasta en los ojos cerrados,
—presencia que no se ve—,
acariciando los párpados.
Tema con variaciones
Variación V
Pedro Salinas